Casi 150 personas realizaron ayer un examen en el polideportivo municipal de Borriol para optar a conseguir un puesto de policía local en el municipio, pese a que sólo se ofrecían dos plazas.
Los candidatos, que pagaron 50 euros por realizar la prueba, llegaron de municipios de toda la Comunitat Valenciana, y si superan este test todavía deberán completar un segundo examen, cuya fecha será publicada próximamente en la página web municipal.
Desde el ayuntamiento explicaron que estas dos plazas no son de nueva creación, y que una de ellas está abierta porque un funcionario ha pedido la incapacidad.
Este es otro nuevo caso de convocatoria multitudinaria para cubrir unas pocas plazas para un puesto de funcionario en la provincia, un fenómeno que se ha disparado a raíz de la recesión económica.
Así, por ejemplo, en abril de 2011 un total de 86 candidatos se presentaron para cubrir dos empleos de peón de cementerio ofertadas por el Ayuntamiento de Burriana. Una convocatoria que años atrás no hubiera despertado demasiada expectación, tal y como confirmaron desde el ayuntamiento de la localidad, ya hace casi una década se planteó una bolsa de trabajo para esos mismos puestos y sólo se presentaron siete personas.
También en Burriana, cuando se ofertaron cuatro plazas de conserje de escuela, en el ayuntamiento se recibieron 328 solicitudes.
Otro caso de convocatoria multitudinaria se dio en Castellón, cuando la Diputación Provincial ofertó en mayo del año pasado 24 plazas de auxiliar administrativo, puestos a los que optaron 2.925 personas. Y eso que había más interesados, sólo que no cumplían las condiciones que requería el trabajo o habían olvidado aportar la documentación necesaria.
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